Proyecto
Escuela - Aprendizaje
Sara Humeres –
Yarella Olivares – Jessica Pizarro
Educación
Diferencial
Escuela, Hogar,
Comunidad y Aprendizaje
Fernando Leiva
10 octubre de 2012
Introducción
En este proyecto se les presentara la problemática que
se produce en la escuela y el aprendizaje que esta directamente relacionada.
Esta problemática la llamamos ¿Por qué el niño no
quiere ir a la escuela? Donde se expresa
diferentes razones por la cual un alumno no quiere asistir a un establecimiento.
Además se explicara la solución para
estos problemas.
Problemática
¿Por qué un niño no quiere ir a la
escuela?
En esta problemática se relaciona la
escuela y el aprendizaje de los alumnos en un establecimiento. Pero esta
problemática se divide en dos etapas:
1)
Niñez
2)
Adolescencia
- Problemas
en la niñez
La negativa de los niños a ir al colegio suele estar
basada en un miedo irracional, que suele aparecer por primera vez en niños que
asisten a escuelas infantiles de edad prescolar, siendo más frecuente en los
que cursan el segundo grado. Para manifestar su disgusto por asistir al
colegio, el niño suele quejarse de dolores de cabeza, de garganta o de estómago
justo antes de la hora de partir hacia la escuela. La "enfermedad"
mejora cuando se le permite quedarse en la casa, pero reaparece a la mañana
siguiente antes de ir al colegio de nuevo. En algunos casos, el niño puede
negarse por completo a salir de la casa y para eso utilizará todas las
estrategias a su alcance como llorar y reaccionar con una rabieta.
Esta actitud es muy frecuente en los primogénitos,
sobre todo, cuando tras la llegada de un hermanito ven cómo él debe salir de
casa, mientras su mamá se queda al cuidado del hijo menor. La negación de ir a
la escuela puede aparecer también después de un período en el que el niño ha
estado en casa en compañía de su mamá, por ejemplo, después de las vacaciones
de verano, de unos días de fiesta o después de una breve enfermedad.
También este repentino temor o desagrado por ir al
colegio se puede presentar por cambios bruscos de pasar de un ambiente de pre
básica donde todo es concebido como juego o manipulación de cosas, a un
ambienta más individual y de enseñanza formal.
Los niños
con un miedo irracional hacia la escuela pueden sentirse inseguros si se quedan
solos en una habitación. También pueden demostrar un comportamiento de apego
hacia sus padres e incluso convertirse en su sombra, siguiéndoles a todas
partes. Estos miedos son comunes en niños que padecen el llamado "desorden
de ansiedad". Además, presentan dificultad para dormir, un miedo exagerado
y un temor irreal hacia los animales, monstruos, ladrones o a la oscuridad. Los
efectos potenciales a largo plazo pueden ser muy serios para un niño con miedos
persistentes, si no recibe atención profesional.
¿Cómo
ayudar al niño que no quiere ir al colegio?
El niño
puede desarrollar serios problemas escolares y sociales, si deja de ir a la
escuela o ver a sus amigos por mucho tiempo. Antes de que eso pueda ocurrir,
los padres pueden ayudar a su hijo llevándolo a un psiquiatra de niños y
adolescentes, quien trabajará con él para que vuelva de inmediato a la escuela
y realice otras actividades diarias.
Con calma
y mucha tranquilidad se pueden superar las barreras del niño. Por lo general,
asistir a la escuela es un evento agradable para los niños pequeños, pero para
otros representa miedo o pánico. Los padres tienen motivos suficientes para
preocuparse cuando ven que su hijo se pone enfermo debido a la tensión. Hay
niños que "fingen estar enfermos" o exageran los síntomas físicos
para quedarse en casa y no ir a la escuela. A menudo, el niño de entre cinco y
diez años de edad, que se comporta de esta manera, está padeciendo un temor
paralizante por tener que dejar la seguridad de la familia y de la casa.
Una cosa
es que los niños disfruten y se estimulen en virtud de los cambios, pero otra
muy distinta es que esto deba hacerse de una forma no meditada o no
planificada, es así como lo plantea Plowden Report (1967, p.427):
“los niños, al igual que los adultos disfrutan y se
estimulan por las novedades y el cambio (el primer día de escuela, el paso a la
“escuela grande”) son momentos señalados en el proceso de crecimiento. Pero si
el cambio pretende estimular y no descorazonar debe presentarse cuidadosamente
y no ser demasiado súbito”.
Es muy
difícil para los padres hacer frente a este pánico infantil, pero estos temores
pueden tratarse exitosamente con o sin la ayuda profesional. Todo dependerá del
grado de temor que tenga el niño. Si los padres notan que puede ser algo
pasajero, es cuestión de insistir, hablarlo con él y con su profesora para que
su día a día en el colegio sea más interesante y, probablemente, todo pasará.
Solución
Algunos
niños requieren un tratamiento extensivo para determinar las causas del miedo.
Los niños mayores o los adolescentes, que se niegan a ir a la escuela,
requieren un tratamiento aún más intensivo. En cualquier caso, el miedo
irracional de abandonar la casa y la compañía paterna o materna se puede tratar
con éxito. Los padres deben solicitar ayuda profesional. El pediatra del niño
puede indicar a los padres un psiquiatra de niños y adolescentes.
2. En la adolescencia
los factores de porque un alumno no
quiere ir a la escuela son importantes ya que los motivos no son tan sencillos
como en la niñez.
Los principales problemas son:
a) La
motivación:
Muchos alumnos cuando asisten al colegio y realizan
sus deberes escolares, al momento de mostrárselos a sus padres o profesores,
buscan que estos valoren los esfuerzos y progresos que consiguen ellos, ya que
lo que se busca no es la ayuda del adulto sino la disponibiidad del adulto en
caso necesario, de manera que los alumnos se sientes acceptados, pero cuando
los adultos no aceptan a estos alumnos que llaman mas la atención, y se
dedican mas a los alumnos con mas “capacidades” en el ámbito académico.
Provocando desmotivación en los alumnos
que como consecuencia arroja que estos
no quieran acudir a la escuela.
A la base de esta situación podemos
analizar la siguiente situación: un alumno que rechazado por el profesor en
reiteradas ocaciones, este alumno posteriormente no querra hacerle preguntas al
profesor ya que pensará “a este profesor no le importa lo que haga”
Solución
En cuanto al aprendizaje es
fundamental que el alumno se sienta “ aceptada incondicionalmente por su
interlocutor para que pueda sentirse a
gusto, trabajar, escuchar y aceptar lo que este pueda decirle” (j.Alonso Tapia,
2005, p.30), esto es que en la medida que los alumnos no se sientan integrados
en las asignaturas, difícilmente podrán progresar en sus aprendizaje. Sin
embrago si los profesores se interesan por las calificaciones del alumno, este
se esforzara por mejorar sus caloificaciones, lo que no quiere decir que los
alumnos aprendar mas, por lo que el enfoque es conversar con los alumnos sobre
lo que ha aprendido en el dia a modo de
una conversación circunstancial.
b) el
bullying
en las escuelas que influye directamente con
el aprendizaje de un alumno.
El bullying es un problema real y
grave en las escuelas, independientemente de los países, del tamaño de los
establecimientos, de la diversidad cultural, del nivel socio-económico de los
estudiantes o de la dependencia educacional de los colegios.
Abraham Magendzo, Paula Legüe y Pablo Madriaza,
investigadores de Fundación
Ideas.
“El fenómeno de bullying o intimidación suele aparecer
desde el sentido común y desde los medios de comunicación como el paradigma
para comprender las agresiones en el contexto escolar, y como tal, a ratos todo
acto de agresión en la escuela parece quedar cubierto bajo el amplio paraguas
que aguanta el concepto”.
Al respecto, es necesario precisar el
fenómeno de bullying para que adquiera sentido y utilidad. Éste
es solo parte de una realidad mucho más amplia que es la violencia escolar.
Por tanto, para que un acto de
agresión sea una expresión de bullying se requiere que la agresión se sostenga
en el tiempo y que entre los involucrados (víctima/agresor) haya una diferencia
de poder.
El hostigamiento tiene que ser permanente en el tiempo
y como tal puede utilizar diversos soportes para ejercerse, los cuales, en la
mayoría de los casos, suelen entremezclarse:
- soporte
físico (golpes, empujones, robos);
- soporte
verbal (insultos, amenazas);
- soporte
relacional o indirecto (exclusión social, rumores) y,
- el
soporte digital (agresiones vía web, celulares, etc.).
Ninguno de estos actos de forma individual y exclusiva
puede considerarse bullying, a no ser que uno o más de ellos se presenten consistentemente
en el tiempo.
Existen dos formas de bullying:
Bullying directo es cuando
el bullying se hace directamente a una persona, por ejemplo esta es empujada,
golpeada, agredida a través de un email o a través de no dejarla participar en
actividades del grupo, etc.
Bullying indirecto es cuando
la agresión se hace a “espaldas” de la persona afectada.
Por ejemplo, se hace correr
un rumor, haciendo senas o hablando en el pasillo a sus espaldas, robándole o
haciéndole daño a sus pertenencias sin que ella/el sepa quien lo hizo,
excluyéndola/o indirectamente sin ser claros de por que no lo quieren dejar
participar en una actividad, etc.
Las cifras en
Chile
existen algunas investigaciones que muestran el panorama nacional sobre
bullying. La última encuesta nacional de violencia escolar, que realizó el
ministerio del Interior de Chile en el año 2007, indicó que
- el
10,7% de los estudiantes reportan haber sufrido bullying de parte de sus
compañeros, presentándose un 7,6% en colegios particulares, un 9,8% en
subvencionados y un 12% en municipales.
¿Existen
soluciones para este problema?
Si
existen soluciones para esta problemática ya que en Chile han tomado conciencia
de la problemática que existe en las escuelas, que es grave y que no hay que
buscar culpable sino que prestar atención tanto para los intimidados como
intimidadores. Para esto han logrado desarrollar una serie de políticas
publicas para enfrentar esta problemática, siendo evaluadas y establecida su
eficacia.
Es
importante saber para los funcionarios de un establecimiento que el bullying
ocurre preferentemente cuando los profesores o adultos no están presentes como
en el recreo, cambio de hora, salida del colegio, camarines, baños, chats,
entre otros.
Los padres son muy importantes ya que ellos son los que
tienen que preocuparse de cómo llega su hijo a la casa para lo cual se dan
señales:
v Llega a casa con su ropa, libros y cosas rotas o le
han sido robadas.
v Tiene moretones, heridas,
cortes y rasguños que no puede explicar
v Ha perdido el interés por ir
al colegio y por hacer tareas.
v Baja en su rendimiento académico.
v No invita a compañeros a su
casa y rara vez va a la casa de amigos.
v Falta de apetito, dolores de
cabeza o estomago.
v Presenta alteraciones en el
sueño como pesadillas.
v Pide dinero extra o saca
dinero a escondidas.
v Cambia de humos de forma
inesperada.
v Esta irritable y con rabia
repentina.
Si se dan cuenta los padres que su hijo esta
participando en bullying:
v Evitar culpabilizar
v Evitar castigar
v Explicar que la intimidación
no es un juego.
v Establecer normas
familiares.
v Sea un buen ejemplo al dar
normas.
v Conocer a amigos.
v Estimular aspectos positivos
del niño.
v Mantener contacto con el
colegio.
v Ayudar a desarrollar estilos
de comportamiento no agresivos.
Se sugiere a los profesores aplicar un instrumento
diagnostico a todo el curso para conocer la situación del establecimiento.
Revisar los resultados, jerarquizar necesidades para así luego realizar un plan
estratégico para así realizar campañas masivas para así romper el silencio de
este tema.
Conclusión
Como hemos podido apreciar son variados los motivos que
pueden provocar el rechazo a la escuela por parte de nuestros alumnos, en esta ocasión
revisamos los miedos infundados, la desmotivación y el bullyng , asi podemos
concluir que muchos de estos motivos tienen a la base problemas de
despreocupación de los padres por el sentir de los hijos o de los profesores
por los alumnos, que sin duda repercuten en el aprendizaje de los alumnos. Asi:
- Los miedos infundados hacen que alumno este pensando
contante mente en el mismo por lo que no se pueden concentrar en el aprendizaje
- La desmotivación hace que el alumno al sentirse
rechazado no vea motivo para realizar sus actividades ni para aprender cosas
nuevas.
- Y el bullyng provoca que los alumnos sientan
contantemente temor ya que sabe que al ir al colegio sufrirá abusos por parte
de sus compañeros u otros, de manera que anímicamente no estará predispuesto al
aprendizaje.