"El educador que quiero ser"

Gabriela Tapia 

Educación Diferencial 2010

Mi visión a futuro como educadora,  es una visión de una persona que empezó siendo una estudiante con vocación y creo que esa es la base para lograr el mejor desempeño como futura docente.

En unos años me veo como una Educadora de Diferencial, que de la pauta a pequeños cambios, cambios que en un futuro se pueden volver grandes cambios en niños que serán grandes personas, no pienso olvidar nunca que trabajamos con niños, y son personas que están en proceso de desarrollo, por esto, pretendo no olvidare que mi trabajo harán un cambio en el desarrollo de esta persona.

Mi rol como Educadora de Diferencial es entender, ante todo, que las diferencias son parte de la vida de cualquier persona, que vivimos en un mundo donde la diversidad es parte de cada uno, que todos tenemos diferencias que nos hacen especiales, y esto no quiere decir que debemos llevar una etiqueta que limite lo que podemos hacer, mi rol será el de ayudar y potenciar el desarrollo de cualquier niño, y ayudar a desenvolverse de la mejor manera dentro de la sociedad.

Como futura Educadora, pretendo formarme como persona, con los mejores valores, admitiendo cuando me equivoco y dispuesta a aprender cosas nuevas, ser una Educadora la cual esté totalmente capacitada, que sea capaz de estar dispuesta a intentar nuevas metodologías y estrategias que favorezcan el aprendizaje de los niños, sin olvidar que todos aprendemos de manera diferente y que debemos respetar este aprendizaje.

Mi visión futura, es también, ser una persona tolerante, que pueda aceptar todas las diferencias, que pueda trabajar en equipo para un objetivo en común, y esté dispuesta a aceptar todas las opiniones para mejorar sus diagnósticos. Creo que como Educadores de Diferencial debemos estar preparados para trabajar colaborativamente con los demás Educadores, aceptando las críticas, sin crear conflictos, para poder trabajar en un ambiente de tranquilidad.

Mi visión a futuro, es lograr ser una Educadora que a pesar que pueda cometer errores, esté abierta a las críticas, aceptando opiniones, con ganas de seguir capacitándome y sin generar exclusión, trabajando de manera responsable para poder lograr la potenciación y el óptimo desarrollo de cada niño.